En un estudio de trabajadores que viajan diariamente a sus trabajos, el número de diferentes tipos de tiendas de alimentos disponibles cerca de las residencias y carreteras de viaje, pero no cerca de los lugares de trabajo, tuvo una asociación significativa con el índice de masa corporal (o alta grasa en las personas). Adriana Dornelles, de la Universidad Estatal de Arizona, EE. UU., Presenta estos hallazgos en la revista de acceso abierto PLOS ONE, el 7 de agosto de 2019.
Investigaciones previas han revelado vínculos entre las tiendas de alimentos disponibles en vecindarios residenciales y los resultados de salud de los residentes cercanos esas tiendas, incluida la medición de la grasa corporal de las personas.
Sin embargo, pocos estudios previos también han incluido tiendas de alimentos cerca de los lugares de trabajo, y ninguno ha examinado las opciones de comprar comida a lo largo de las carreteras de viaje. El nuevo estudio aborda la relación entre estos tres entornos de comidas y la medida de grasa de las personas.
Ornelles analizó datos de 710 empleados de escuelas primarias en Nueva Orleans, Louisiana. Basándose en las bases de datos existentes, determinó la cantidad de supermercados, restaurantes de servicio completo y restaurantes de comida rápida dentro de 1 kilómetro de las direcciones residenciales y laborales de los empleados. También determinó el número y tipo de tiendas de alimentos dentro de 1 kilómetro de la carretera de viaje más corta entre la residencia de cada empleado y su lugar de trabajo.
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Ajustando por factores sociodemográficos, los análisis estadísticos mostraron que un mayor número de restaurantes de comida rápida cerca de la ruta de viaje se asoció con una mayor medida de grasa en las personas.
mientras que un mayor número de restaurantes de servicio completo cerca de las residencias se relaciona con una menor medida de grasa en las personas. El análisis no encontró ningún vínculo con mayor grasa o personas gordas a través de los alimentos disponibles en restaurantes de servicio completo cerca de los lugares de trabajo.
El autor señala que estos hallazgos resaltan la necesidad de considerar múltiples factores ambientales al examinar los contribuyentes a la medición de la grasa corporal de BMIA en adultos. La investigación futura podría explorar las carreteras exactas de viaje de las personas y los hábitos de compra de alimentos a lo largo de esas carreteras, así como analizar los resultados de salud más allá del IMC Una medida de grasa corporal en adultos. Una comprensión más profunda de estos factores podría ayudar a informar las intervenciones para promover mejores resultados de salud.
En nuestra vida diaria, estamos expuestos a varias opciones de alimentos saludables y no saludables, lo que tiene un impacto en la medida de grasa corporal de las personas. La disponibilidad y variedad de restaurantes de comida rápida a lo largo de nuestro viaje o al trabajo diario crean infinitas oportunidades para una comida rápida, barata y poco saludable, lo que resulta, en promedio, en un índice de masa corporal más alto
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